La Comunidad Educativa de El Plantío ha querido poner el broche final al 150 aniversario celebrando una Eucaristía de acción de gracias en la Parroquia Santo Tomás Moro de Majadahonda a la que pertenecemos.
El día 30, en el marco de la jornada de orientación, los niños y niñas de 1º y 2º Primaria y posteriormente los pequeños de Infantil tuvieron una bonita celebración en el salón de actos haciendo memoria de todo lo vivido y dando gracias por ser parte de esta historia.
Hacia las 11.00 h nos encaminamos hermanas, alumnado, familias y profesores hacia la Parroquia donde estábamos convocados a las 12.00 h para clausurar juntos este acontecimiento vivido en el 2022 con fuerte sentido de pertenencia y mucha ilusión. Era hermoso ver a todo el colegio, desde 3º de Primaria en la Parroquia, muchas salesianas de las dos comunidades de El Plantío, una representación de familias y tantos educadores que son hoy, en nuestro colegio, D. Bosco y Maín.
Nos acogió el nuevo párroco, D. Gonzalo Moreno, recién estrenado que nos dio la bienvenida expresando su alegría al recibirnos en los primeros días de su llegada a la Parroquia. Él mismo nos presentó a D. Juan Carlos Merino, Vicario Episcopal de la Vicaría VII, que accedió gustoso a nuestra invitación, presidió la Eucaristía y conectó rápidamente con los presentes y con nuestro estilo educativo.
Nos invitó a ser “gente luminosa” subrayando la necesidad de hacer el bien. Manifestó el reconocimiento a las Salesianas que son gente luminosa en su respuesta de seguir al Señor en la vida religiosa Salesiana e invitó a acercarse a ellas y decirles: gracias por tu sí. Si estamos aquí y formamos parte de esta historia es precisamente porque María Mazzarello se dejó iluminar para ser luz y sal en medio de las niñas y jóvenes, para dar vida y construir el Reino de Dios. El profesorado y todos aquellos que en el colegio están al servicio de la educación y de la evangelización iluminan y ofrecen lo mejor de sí para el bien de niños y jóvenes.
Finalizó invitándonos a contar con María Auxiliadora como madre que vela por nosotros y acompaña nuestra vida saliendo al paso de nuestras necesidades.
Una mañana sencilla y muy entrañable que terminó con el canto y baile del himno del 150 aniversario en un ambiente de fiesta y mucha alegría.
