Un día muy esperado por todos los participantes del Campobosco (#CPB22) llegó al fin: el 5 de agosto con la visita a Turín, a los lugares salesianos que marcaron la vida como sacerdote de San Juan Bosco, dedicada por entero al cuidado y la educación de los muchachos más pobres de su época en el Siglo XIX.
A las 18:30 horas tuvo lugar la misa presidida por el Rector Mayor. Toda la Basílica estuvo repleta de los jóvenes acompañando a Don Ángel. Como buen padres recordó a los jóvenes las tres palabras del campobosco:
“Atrévete a afrontar los retos de la vida y ponerlos en manos de Dios, porque te dará mucha paz; confía en que Dios nos sostiene y vive a pleno pulmón, siendo feliz en tu proyecto de vida”