El CJ Sant Andreu celebra 50 años llenos de vida
El Centre Juvenil Sant Andreu de Barcelona celebró su 50º aniversario con una fiesta el pasado 24 de mayo, coincidiendo con el día de María Auxiliadora. “Lo hicimos con mucha alegría e ilusión ya que han sido 50 años llenos de vida, dando vida con muchos niños, jóvenes, educadores, profesores y familias que han ido pasando por aquí a lo largo de estos 50 años”, expresa Carme Sabé, FMA encargada del centro juvenil. En total, unas 200 personas pasaron a lo largo de la jornada por la antigua Escola Mare de Déu de la Soledat para sumarse a las celebraciones.
Al inicio del día, Carme Sabé dedicó unas palabras de agradecimiento a tantas personas que han pasado por el centro juvenil educando a los niños y niñas. Agradecimiento a las generaciones anteriores y también a María Auxiliadora, en el día de su fiesta.
Actividades
Los participantes, especialmente los más pequeños, pudieron disfrutar de diversas actividades, como talleres para hacer chapas conmemorativas o decorar piedras, un futbolín, hinchables… También se habilitó un museo para exponer fotos y objetos de años anteriores, con una estatua de María Auxiliadora presidiéndolo. No faltó la música para ambientar y una comida especial, una ‘butifarrada’, preparada por monitores y familias.
La fiesta continuó por la tarde, con otros momentos especiales. Un grupo de antiguos monitores interpretaron una actuación teatral para traer al recuerdo lo vivido en el centro juvenil a lo largo de estos 50 años. También hubo una ofrenda floral a María Auxiliadora, dándole gracias por este aniversario.
La jornada concluyó con una traca y compartiendo el pastel conmemorativo del 50º aniversario del CJSA. “Damos gracias a María por tantas personas que han donado su tiempo preparando actividades con mucho amor, intentando que fuese un espacio acogedor para todo el mundo, familiar, alegre, de diálogo y de perdón. Espacio que educa con el carisma salesiano, a través de los valores humanos y cristianos. Damos gracias a María por los 50 años del centro juvenil y los 75 de presencia en el barrio. Gracias, María”, concluye Sabé.