ACOGIENDO EL RETO DE LA MISIÓN HOY

Todo empezó el día 27 de septiembre con la peregrinación a Turín, donde participamos en la celebración del envío misionero:  salesianos y FMA que partirán a la misión en este curso 24-25. Seguimos caminando hacia Valdocco y Mornese pasando por Niza; en cada lugar pudimos experimentar de nuevo la fuerza del carisma donde estuvieron presentes nuestras comunidades con todas las personas con las cuales hacemos que no sólo hablen los lugares sino la vida que se crea, se vive y sigue dando vida hasta el día de hoy.

Comenzamos, el 7 de octubre, el Curso de Formación Permanente Misionera que se ha realizado en la Universidad  Pontificia Salesiana, en el cual hemos participado 12 Hijas de María Auxiliadora y tres religiosos/as de otras congregaciones (Hijas del Oratorio, Combonianos e Hijas de la Providencia), provenientes  de América del Sur, África y Europa, con los objetivos: revitalizar la dimensión misionera de la propia vocación, reflexionar sobre algunos temas (teológico-pastoral-espiritual) unidos a la misión de la Iglesia, y favorecer el compartir de la experiencia misionera.

En este periodo de reflexión y actualización, reforzamos el empeño de andar al encuentro de los desafíos que hoy presenta la misión a través de una lectura contemporánea de la existencia en su faceta social, cultural, religiosa y humana.

No sólo fueron momentos de recibir contenidos, sino que también hubo oportunidad de encuentro con otras actividades de “Iglesia en salida”, como dice el papa Francisco: la visita a la Iglesia de Jesús Redentor de los padres Scalabrini; la visita al edificio de las Obras Misioneras Pontificias, donde tuvimos oportunidad de ver la actividad que se lleva a cabo en la Propaganda de la Fe, la obra de la Infancia Misionera y la pontificia obra de San Pedro Apóstol. Otro momento significativo fue peregrinar por Roma a los lugares visitados por D. Bosco en su pasar por la gran ciudad; o el encuentro con la comunidad de San Egidio, donde abren sus puertas a emigrantes para el estudio de la lengua italiana. Los tres días pasados en Asís consistieron en una experiencia vivida con nuestros hermanos franciscanos, donde todo invitaba a la oración.

El 30 de octubre participamos en San Pedro en la audiencia con el Papa y en la misa del peregrino. Cerró todo este peregrinar la visita a los locales de la Postulación General Salesiana, en la comunidad de Zeferino Namuncurá. Un momento para potenciar nuestra oración al ejército de santos salesianos.

En otros momentos, hemos compartido en la Casa Generalicia con Madre Chiara y las hermanas del Consejo, así como con todas las hermanas de la comunidad, sintiéndonos acogidas dentro de la gran diversidad. Agradecer a Sor Ruth, consejera por el ámbito de las Misiones, y a Sor Ana María y Sor Pamela, colaboradoras del ámbito, que nos han acompañado en todo momento.

El 8 de noviembre tuvimos la clausura de esta gran “tiempo de gracia”. Nos lanzamos a seguir los caminos de la misión abiertas a escuchar las preguntas y las opciones de vida siempre nuevas que Dios pondrá en el camino de cada una de nosotras para ser “rayos de luz y de esperanza”, viviendo con fuerza este tiempo que ya hemos comenzado de los 150 años de la primera expedición misionera. Gracias por esta oportunidad.

Carmen Ramos, FMA

Fuente: Instituto FMA