Un reencuentro con alma: antiguos alumnos y alumnas reviven el espíritu salesiano en el colegio María Auxiliadora de Alicante
El sábado 18 de octubre, el colegio María Auxiliadora de las Salesianas de Alicante, cobró vida de una manera muy especial. Los antiguos alumnos y alumnas, llegados de diferentes lugares, se reunieron para revivir momentos que marcaron su infancia y juventud. Los pasillos, las aulas y el patio —testigos silenciosos de tantas historias— se llenaron de risas, abrazos y conversaciones que parecían retomar justo donde se habían quedado 16 años atrás.
La emoción se palpaba en el ambiente. Muchos volvieron a encontrarse con las hermanas Salesianas, a quienes agradecieron las enseñanzas, los valores y la cercanía que les dejaron huella. Otros recordaron con cariño aquellos días de juegos, exámenes, festivales y amistades que, a pesar del paso del tiempo, siguen ocupando un lugar especial en la memoria. Al recorrer los espacios conocidos y los que en estos años se han reformado, se entremezclaban sentimientos de nostalgia y sorpresa. La visita a la capilla dio la oportunidad de encomendar sus proyectos a Dios a través de la Virgen María, como enseñan D. Bosco y M. Mazzarello.
Durante el encuentro, se compartieron anécdotas, fotografías y sueños cumplidos, demostrando que el espíritu salesiano que un día les unió sigue vivo. Fue un reencuentro con el pasado, pero también una mirada al futuro: un compromiso de mantener los lazos, de seguir apoyando al colegio que los vio crecer y de no dejar que el tiempo diluya lo que allí se forjó.
El encuentro concluyó con una promesa sencilla pero profunda: volver a verse, mantener viva la amistad y conservar, en cada paso del camino, el orgullo de pertenecer a esta familia que no solo formó estudiantes, sino personas unidas por una historia común. Porque, en definitiva, más que un lugar, el colegio María Auxiliadora sigue siendo un hogar compartido en el corazón de todos y todas.
María Baeza, exalumna y profesora del Colegio.

