Sor Troncatti, una nueva santa para la Iglesia

En nuestra casa de Tuineje – Fuerteventura hemos vivido con intensidad el mes de octubre, mes misionero por excelencia y con un cariz especial este año al coincidir con la canonización de sor María Troncatti que, poco a poco, se ha ido haciendo un espacio en el corazón de los majoreros que han podido acercarse a su figura. Durante los nueve días anteriores a su canonización por los diferentes grupos de WhatsApp cada día fuimos enviando información sobre su vida y breves oraciones.

El jueves día 16, tras la eucaristía parroquial de Tuineje, se invitó a la gente al salón parroquial para profundizar su figura con el documental sobre su biografía y el testimonio de Juwa Bosco cuya curación se reconoció como milagro para la canonización.

Al día siguiente, viernes 17 de octubre, la comunidad nos unimos online al evento organizado en la Casa Generalicia con el que se abrían oficialmente las celebraciones para la Canonización de sor María Troncatti. Enviamos el enlace para seguirlo en directo a las personas más cercanas y quienes lo pudieron seguir nos expresaron la alegría por poder compartir este momento de familia.

El domingo 19 octubre, día de la canonización, invitamos a la gente a unirse online al evento conectando con la Plaza de San Pedro. Vino una docena de personas y uno de los asistentes, Bruno Jan J. de Wachter, de origen belga, que ya tenía relación con la Familia Salesiana, tuvo el detalle de traernos impresos varios ejemplares del último Boletín Salesiano de Ecuador, un monográfico de sor María Troncatti que repartimos entre los asistentes y lo volverán a traer tras leerlo para que otros puedan también enriquecerse con su lectura. Terminamos tomando juntos un chocolate con churros para celebrar la nueva santa para el Instituto, para toda la Iglesia. Por la tarde, en la Eucaristía dominical de la parroquia, presidió la imagen de S. Troncatti acompañada de su reliquia que al final se invita a venerar como expresión de fe que busca inspiración y pide la intercesión de la nueva santa ante Dios.

Así mismo, el jueves siguiente, día 23, al tiempo que en la Catedral de Canarias en Las Palmas acogía la Eucaristía de acción de gracias por la canonización de sor María Troncatti, presidida por el obispo auxiliar, Mons. Cristóbal Déniz, también en nuestra parroquia celebrábamos un Eucaristía de acción de gracias. Al inicio de la misma, S. Paloma Redondo, directora de la casa, leyó un breve perfil biográfico de la nueva santa y durante la homilía, el párroco D. Aday García destacó como tras su canonización sor María Troncatti es “menos de la congregación y más de toda la Iglesia” y como la canonización de un nuevo santo es la ocasión de alabar a Dios por las maravillas que hace en quien se abandona en sus manos.

En la misión entre los niños y adolescentes en estas semanas S. Paloma ha dedicado las catequesis con los grupos de postcomunión en Pájara y de confirmación de Tuineje a dar a conocer su figura. Además, el sábado 25 de octubre se ha ofrecido a los niños de catequesis de las diferentes parroquias participar en unos Talleres misioneros. En Gran Tarajal participaron 28 niños y niñas de Pájara, Tuineje, La Lajita, Toto, Gran Tarajal, Las Playitas, Tarajalejo… La mañana fue animada por las hermanas y varias catequistas y junto a ellas tres adolescentes de los grupos de confirmación echaron una mano. A la llegada les presentaron la figura de sor María Troncatti como una gran misionera. A continuación, por grupos reflexionaron sobre el equipaje que ha de llevar un misionero (fe, Biblia, oración, valentía, esperanza…) pegando dentro del dibujo de una mochila o del botiquín de S. María Troncatti todo lo que necesita un buen misionero. Se comenzó a elaborar juntos un mural que llevaba por título “También nosotros somo misioneros de esperanza” pegando las mochilas y los botiquines cargados con todo lo necesario. Después, cada niño escribió su compromiso misionero sobre el dibujo de una llama, símbolo del cartel del Domund 2025, y se añadió también al mural. Se concluyó la mañana entregando a cada niño una pequeña biografía de S. Troncatti con imágenes para colorear y rezando la oración que se incluía al final de la misma pidiendo al Señor que nos concediera un corazón más parecido al suyo.