EL JARDÍN DE LA GRATITUD

Esta fue la propuesta del equipo de fiestas y pastoral y fue bien acogida. A lo largo de la semana fueron brotando cantidad de iniciativas que iban dando color y armonía a todo lo que se hacía en la casa: variedad de pétalos y flores y, sobre todo, variedad de hojas y tamaño, portadoras de mensajes  que  hablaban de corazones agradecidos a sus educadores, a la familia, a los compañeros, a las hermanas, al personal no docente, a nuestro Dios:

“Gracias, por hacerme feliz todos los días”,

“gracias por sacarme una sonrisa en los momentos difíciles”,

“gracias por escucharme “

“por acompañarme a lo largo de toda mi andadura en el colegio”. Y así otros, y otros.

Todo ello se convirtió en expresión artística, un espectáculo extraordinario los días 21 y 22 de marzo ante muchas personas, familias, amigos, hermanas, profesores…que llenaban el salón de actos,  abajo y  arriba. La fiesta siempre une, la fiesta arranca aplausos. Había sabor a Mornese, a Valdocco. Los dos corazones de plata, regalo de Carlos y Félix a Don Bosco siguen inspirando palabras y sobre todo gestos de bien como el ramo de flores que los alumnos de 3º de ESO ofrecieron a su tutora para pedirle perdón por algunos malos ratos pasados y agradecerle su paciencia y comprensión, por seguir creyendo en ellos. Y así también los de 4º, casi logran levantar a todos de las butacas para unirse a su baile a modo de ronda, por todo el teatro, para mostrar su alegría y gratitud.

Y… ¿Cómo no destacar el momento compartido entre el profesorado y la comunidad de hermanas? Palabras hechas gesto, detalle y agradecimiento. Aún resuena en nuestra sala aquello de “gracias por vuestro apoyo a esta gran obra educativa que, al igual que para Don Bosco y para Madre Mazzarello, para nosotros ESCUELA y PATIO no son espacios físicos, sino ACTITUDES DEL CORAZÓN”.

Una fiesta, decían los presentadores del festival, que involucra a toda la comunidad educativa, y que siempre habla de mensajes:  de la importancia de confiar en uno mismo y del trabajo en equipo, de no rechazar a nadie por su aspecto, aceptar a todos, del poder de la amistad o de respetarse a uno mismo tal y como uno es…Que habla también de abrir nuestros corazones a los que nos rodean y confiar en los que se preocupan por nosotros…¿de qué pelis crees que estoy hablando…?

Una gratitud de cine, inspirada en el musical de “El rey león” y en películas infantiles que a todos nos hacen disfrutar.

Podéis descubrirlo en este enlace que recoge la velada:

 ¡Que nunca falte esta fiesta en nuestras casas! Sí, la palabra GRACIAS se repite muchas veces, se escribe, se canta. Pero siempre es una palabra nueva. Y cada vez que se asoma a nuestros ojos, resuena de diferente manera. Sin duda, la raíz de todo bien crece en la tierra de la gratitud.

Sor Corona Nieto