FINALIZA LA VERÍFICA TRIENAL EN FÁTIMA

El sexenio 2021-2027 del Instituto de las Hijas de María Auxiliadora atraviesa su ecuador. Con el propósito de hacer un balance, la Conferencia Interinspectorial Oriente Medio–Europa (CIME) ha celebrado, del 8 al 12 de enero, su Verífica Trienal en Fátima (Portugal).

Compartimos el testimonio de uno de sus participantes, Enrique Jiménez:

El 13 de enero, saliendo de Fátima en este día tan señalado tanto para la devoción a la Virgen de Fátima como para nuestra Familia Salesiana, recordando a Maín, finalizamos las cinco jornadas de Verífica que hemos compartido con las 102 personas venidas de 22 inspectorías de la CIME. Entre ellas, Madre Chiara Cazzuola, la Vicaria General, nuestra sor Chary, y 7 hermanas del Consejo General, incluida sor Marta Riccioli, nuestra visitadora.

Representando a nuestra inspectoría en este crisol de idiomas y culturas, hemos estado Charo Ten, inspectora; Mercedes Rodríguez, vicaria; Maite Seva, fma; Sara Ruiz-Canela (animadora del centro juvenil de Plaza Castilla) y Enrique Jiménez (orientador y profesor del colegio de Barakaldo).

Ha sido una gran experiencia de encuentro y de compartir la riqueza de la diversidad del carisma, y de darnos cuenta de la vitalidad del Instituto en cada una de las distintas realidades.

Hay que agradecer a la comisión que tan bien ha preparado el encuentro en este lugar tan emblemático. Una estructura de trabajo bien preparada, comenzando cada día con una reflexión de la Madre que encauzaba el trabajo del día, con trabajo de grupo para debatir y aportar. Las dinámicas y organización de los grupos ha sido diversa y eso nos ha permitido ir conociendo a la gente. Y los temas trabajados han sido los que previamente se habían profundizado en cada inspectoría, desde la revisión del Capítulo General XXIV, hasta la propuesta de temas para el siguiente capítulo, pasando por la ecología integral y la actualización de las bienaventuranzas, entre otros.

A esto le añadimos los momentos de oración y celebración conjuntos: eucaristía cada mañana en el santuario, comienzo del día, vísperas… Capítulo aparte en las buenas noches, donde la Madre, algunas consejeras y hermanas de distintas inspectorías nos mostraban su realidad tan distinta de la nuestra.

Tuvimos también la oportunidad de recorrer los lugares santos de Fátima con una visita guiada muy completa. Y a esto se le suman los momentos de convivencia informal culminados con la velada de ayer, preparada por las hermanas de Polonia, que tan buen rato nos hicieron pasar.

En definitiva, un encuentro gozoso, rico en la diversidad, que nos anima a seguir dando pasos, a seguir soñando y buscando cómo ser fieles al carisma de nuestros fundadores, en esta vivencia sinodal de la misión, desde el realismo, pero con optimismo, como peregrinos de la Esperanza. Crecemos como CIME, ya que estos encuentros nos dan la oportunidad de conocernos y trazar puentes. Crecemos en misión compartida con la participación activa de laicos y jóvenes en el encuentro.

En febrero tendremos la oportunidad de transmitiros lo vivido en dos sesiones online, para que cada uno pueda elegir en cuál participar.

Hemos rezado por todos y cada uno delante de la Virgen de Fátima y os hemos sentido cercanos todo este tiempo. Ella, la Virgen, nos sigue guiando y acompañando en esta peregrinación vital. Un abrazo fraterno.