Presentado el Aguinaldo 2025 en la Casa Generalicia de las FMA: ‘Anclados en la esperanza, peregrinos con los jóvenes’
El 27 de diciembre de 2024, en Roma, en la Casa General del Instituto de las Hijas de María Auxiliadora, el Vicario General de los Salesianos de Don Bosco, don Stefano Martoglio, al frente de la Congregación tras la renuncia del Cardenal Ángel Fernández Artime, como es tradición presentó a las Hijas de María Auxiliadora como primicia y a toda la Familia Salesiana el Aguinaldo que acompañará a todo el mundo salesiano en el nuevo año 2025.
En línea con el camino de la Iglesia, viviendo el gran acontecimiento del Jubileo, el texto lleva por título ‘Anclados en la esperanza, peregrinos con los jóvenes’ y es una invitación a profundizar, como cristianos y como salesianos, en las “razones de nuestra esperanza”. Cristo es el fundamento de la esperanza, el ancla de la salvación, y hacia Él caminamos en compañía de los jóvenes, mirando hacia la realidad celestial, no para huir de la realidad cotidiana, sino para hacerla habitable para todos comprometiéndonos activamente como “buenos cristianos y honrados ciudadanos”.
El Aguinaldo nos recuerda, en el año en que celebramos el 150 aniversario de la primera expedición misionera de los Salesianos de Don Bosco y el inicio del Trienio hacia el 150 aniversario de la primera expedición de las Hijas de María Auxiliadora, que reavivemos el ímpetu misionero que caracteriza no sólo al misionero ad gentes, sino a todo cristiano, a toda comunidad.
Sor Leslie Sandigo, Consejera General de la Familia Salesiana, dio la bienvenida a los presentes y a los que se conectaron online a través de en directo, introduciendo la oración, centrada en la paz:
“Juntos, como Familia Salesiana, queremos agradecer al Padre Stefano el don del Aguinaldo, que nos invita a mirar en la misma dirección, siguiendo los pasos de Don Bosco y los orígenes de nuestro carisma, hacia las necesidades de los jóvenes y de la sociedad de hoy que claman por la paz, la esperanza y no más guerras. Estamos llamados, como Familia, a entregarnos y construir la paz allí donde nos encontremos”.
A continuación, presentó el vídeo de presentación del Aguinaldo, realizado por IME Comunicazione, que se proyectó en primicia mundial.
“Espera en el Señor, sé fuerte, que tu corazón se reanime y espera en el Señor” (Sal 27). Allí donde el presente hace ruido, es donde nuestra esperanza debe irrumpir con fuerza. Pero, ¿cómo hacerlo?
Este es el incipit del vídeo, que, a través de las historias de algunos jóvenes de diferentes realidades del mundo, comentadas por don Stefano Martoglio, narra el camino de la esperanza en la vida cotidiana, con sueños, expectativas, preocupaciones: “La esperanza no es la convicción de que algo saldrá bien pase lo que pase, no es algo que nos quita las preocupaciones, es la certeza de que algo tiene sentido, más allá de su resultado”.
¿Dónde encuentro la fuerza? ¿De dónde viene esta esperanza? – se preguntan los jóvenes. “Cristo es el ancla de la esperanza, que soporta los sufrimientos, las heridas de la humanidad en la cruz, para conducirla al Padre. (…) Dios nos ha hecho una promesa y piensa cumplirla. Por eso nos ha dado a Cristo, nuestra ancla de salvación, para que permanezcamos fijos en la eternidad, aun viviendo nuestro tiempo, a través del mar de nuestros días, con todas las olas que habrá, cada día. Nuestra mirada al cielo, y nuestros pies firmemente plantados en la tierra. (…) La esperanza no defrauda, no porque engañe, sino porque es Cristo”.
Tras el vídeo, la Hna. Ausilia De Siena, Consejera para la Comunicación, presentó a Flaminia y Antonio, dos jóvenes que hablaron con el P. Stefano sobre el contenido del Aguinaldo. El Vicario no ocultó su emoción en lo que describió como un “privilegio poder acompañar a la Familia Salesiana con este sentido del don para el nuevo año que Don Bosco nos ha transmitido”.
La Madre Chiara Cazzuola concluyó este intenso e interesante coloquio agradeciendo al P. Stefano la belleza y la riqueza de los contenidos del Aguinaldo, «que pueden marcar un camino y también una renovación para nosotros, en el sentido de nuestro ser Familia Salesiana, de nuestra vocación personal y comunitaria, porque compartimos un gran Carisma, y también para revitalizar nuestro espíritu misionero».
Entre los diversos pasajes, la Madre destacó el sentido de presencia, de generatividad: “Todo el Sistema Preventivo de Don Bosco gira en torno a esto y lo que falta en la civilización de hoy es precisamente el sentido de humanidad, el sentido de estar ahí, de presencia. Así que veo esto como una invitación providencial, en primer lugar como Familia Salesiana, pero también como cristianos. (…) El Señor se encarna en esta historia y nos lanza a su aventura, llamándonos a compartir su fuerza, que para nosotros se convierte también en el ser presencia, por parte de cada uno de nosotros, que genera vida allí donde está y con quien está”.
Un último gesto concluyó este hermoso momento de familia: la Hna. Leslie llamó a los representantes de la Familia Salesiana y a una misionera que inicialmente sacaron de la vela la luz, que representa a Cristo, con el compromiso de llevarla a su ámbito cotidiano de compromiso, “para ser artesanos de paz, hombres y mujeres de esperanza”.
Fuente: Instituto FMA