VISITA MADRE CHIARA CAZZUOLA

Del 15 al 20 de febrero, Madre Chiara Cazzuola visitó algunas de las casas de la Inspectoría María Auxiliadora de España y realizó una peregrinación por los lugares significativos relacionados con S. Eusebia Palomino, con motivo de la celebración del centenario de su profesión y del 20 aniversario de su beatificación.

Madre Chiara Cazzuola, décima sucesora de Madre Mazzarello, visitó por primera vez los lugares donde vivió sor Eusebia Palomino Yenes: Cantalpino, Salamanca, Barcelona-Sarriá y Valverde del Camino. Vino acompañada por sor María del Rosario García, vicaria general, y primera provincial de la Inspectoría María Auxiliadora de España de las FMA. La recibieron el día 14 de febrero en el aeropuerto de Barajas (Madrid) sor María Rosario Ten, provincial, y las hermanas del Consejo.

Coincidió su visita con el inicio del camino cuaresmal de este año 2024. Además de acercarse a los lugares donde Eusebia Palomino fue madurando su vocación cristiana y vivió como educadora salesiana, Madre Chiara compartió saludos, momentos de oración y de fiesta con hermanas, jóvenes, niños y educadores, miembros de la Familia Salesiana y responsables de los servicios inspectoriales. Con su cercanía y sencillez, Madre Chiara comunicó esperanza y alegría a cuantos se pudieron acercar a ella, y muy especialmente a las hermanas mayores y enfermas de las casas que visitó.

La jornada del día 15 de febrero comenzó con la Eucaristía en la capilla del colegio María Auxiliadora de Villaamil, Madrid, presidida por Fernando García (SDB), inspector de la Inspectoría Santiago el Mayor de los Salesianos.  A continuación, Madre Chiara se encontró con la actual provincial, S. María Rosario Ten, y las hermanas del Consejo Inspectorial. Pudieron compartir el camino realizado como Inspectoría en estos 7 años: procesos significativos, fortalezas y caminos de futuro. Por la tarde, después de saludar a las hermanas de la residencia Santa Teresa de Madrid, se dirigió al CES Don Bosco donde fue recibida con bailes, música y unas palabras de bienvenida en nombre de toda la comunidad educativa. Después, se encontraron con las FMA de Madrid. Por la noche, con el título “Semillas de santidad”, tuvo lugar la Noche de Arte y Oración, que recreó la santidad de nuestras hermanas. Música en directo, gestos, danza, silencio y comunidad reunida alrededor de Madre Chiara Cazzuola.

El viernes 16 de febrero por la mañana visitó Cantalpino, el pueblo natal de sor Eusebia Palomino. Tuvo la oportunidad de conocer directamente el ambiente de pobreza en el que vivió la familia Palomino Yenes y sobre todo, su fe sólida en Dios. Continuó su recorrido por Salamanca, donde la recibió el alumnado del Colegio San Juan Bosco, tuvo un encuentro con las FMA de la zona y compartió la comida con hermanas, miembros de la Familia Salesiana y de las comunidades educativas de Salamanca, Béjar, León y Burgos. Después de las buenas tardes, conoció la parte de la ciudad que guarda relación con el paso de Eusebia por esta, de 1917 a 1922.

El sábado 17 de febrero, estuvo en Sarriá, Barcelona. Allí fue acogida por las FMA de distintas casas de España; la Familia Salesiana, que celebraba su encuentro anual de zona ese día; educadores y educadoras; jóvenes del MJS; servicios inspectoriales… Pudo conocer la Torre Gironella y su historia, primera casa de las Salesianas en España y lugar donde sor Eusebia Palomino realizó su noviciado y su primera profesión religiosa. A continuación, se celebró la Eucaristía. Por la tarde, después de visitar la Sagrada Familia y Can Prats, dirigió unas palabras en las buenas noches, que se retransmitieron en directo.

El domingo 18 de febrero viajó a Sevilla. En la casa de Sanlúcar la Mayor tuvo un encuentro con las FMA en el que compartieron la alegría de sentirse Hijas de María Auxiliadora. A continuación, se celebró la Eucaristía en la que estaban presentes miembros de los servicios inspectoriales, directivos de escuelas, plataformas sociales, animadores de tiempo libre y Familia Salesiana. Después de comer, se dirigió a Valverde del Camino para continuar su peregrinación, donde pudo estar en el oratorio de sor Eusebia y en otros lugares significativos, realizando un itinerario de oración animado por miembros de la comunidad educativa.

El lunes 19 de febrero, Madre Chiara comenzó la jornada con la Eucaristía en la parroquia Nuestra Señora del Reposo de Valverde del Camino. A continuación, pudo visitar al pintor valverdeño Manuel Parreño, autor del cuadro del milagro de sor Eusebia. Una vez en el colegio, pudo disponer de un tiempo de oración personal y por último, se despidió de todo el alumnado para seguir con su visita a Sevilla. Una vez en Sevilla, se encontró con las hermanas mayores y enfermas de la Casa Madre Mazzarello. Por la tarde, visitó la Casa Sor Eusebia, inserta en un barrio periférico de la capital, que está celebrando los 25 años de apertura y muy significativa por la respuesta que está dando a colectivos muy vulnerables. Para finalizar el día, se dirigió a Sanlúcar la Mayor para encontrarse con todas las directoras de comunidad.

El martes 20 de febrero concluyó su visita a nuestra inspectoría con una jornada formativa con las directoras de comunidad. Empezaron el día con la Eucaristía, presidida por Fernando Miranda (SDB), inspector de la Inspectoría María Auxiliadora de los Salesianos. Después de la oración y del saludo de sor María Rosario Ten, provincial, reflexionaron conjuntamente sobre el tema: «Hacia un servicio más generativo y sinodal.» A continuación, como gesto, plantaron un almendro en los jardines de la casa de Sanlúcar la Mayor. La jornada concluyó con las últimas buenas noches de Madre Chiara y la velada, un momento de convivencia fraterno.

La experiencia de encuentro con sor Eusebia Palomino, objetivo prioritario de esta visita, fue creciendo en detalles y en profundidad en cada lugar con la acogida de las personas, los símbolos, los cantos, los espacios de oración… Madre Chiara lleva en su mente y en su corazón gratos recuerdos: “la choza” de la familia Palomino Yenes; “el paraíso de Eusebia donde tantas cosas bellas aprendió”; la primera imagen de María Auxiliadora con la que se encontró en Salamanca y alimentó su esperanza de ser toda para el Señor; el molinillo de café que usó en la cocina mientras trabajó con las hermanas. En Barcelona-Sarriá, la primera casa de las Hijas de María Auxiliadora en España, testigo de la vida de entrega, oración y de la primera profesión de sor Eusebia; y también las habitaciones en Can Prats donde Don Bosco tuvo ese sueño misionero que marcó la expansión por todo el mundo de salesianos y salesianas. En Valverde, la presencia educativa y sencilla de sor Eusebia que, con el sonido de la campana recordaba a las niñas del oratorio, “la voz de Dios”; y la habitación donde estuvo alojada con una familia, cuando comenzaba en España, la persecución religiosa.

Gracias Madre Chiara por tu visita a nuestra inspectoría, por tu presencia hoy y aquí entre nosotras; eres para todas “como la rama de almendro que florece”. Que el Señor bendiga todo lo que plantas en el Instituto y con el Auxilio de María, florezca y dé fruto a su tiempo. ¡Gracias!