Enseñar y aprender, la experiencia de dos voluntarios internacionales de Madreselva en Madagascar
La experiencia del voluntariado internacional está dejando una profunda huella en los corazones de Homero y Francisco. Estos dos jóvenes fueron enviados por la ONGD Fundación Madreselva a Ivato, en Madagascar, el pasado 28 de junio para colaborar en la misión de las Salesianas en el país africano.
Desde su llegada, se han integrado con entusiasmo en la vida de la comunidad. Homero está enseñando francés y Francisco, español a las niñas del lugar, compartiendo no solo conocimientos, sino también sonrisas, juegos y momentos inolvidables. Cada día es una oportunidad para aprender, servir y crecer junto a las niñas y las hermanas que hacen parte de esta misión.
Una presencia muy especial en esta experiencia es la de la salesiana colombiana sor Dora, directora de la misión, que ha acogido con mucha alegría a ambos voluntarios internacionales.
Cuando se ofrece el corazón, las distancias se acortan y la misión se convierte en hogar.